Como ciudadana de Chile y porque me importa lo que pasa en éste país, es que me tomo la libertad de escribir, pero antes señalar que hace 15 años estudio las personalidades y sus formas de ser, con un instrumento antiguo dejado por los Mayas.
Este estudio está basado en una investigación empírica, encontrando constantes impresionantemente exactas, en la conducta humana. Para esta investigación he usado la cuenta de los años mes y días, más la matriz energética llamada Tzolkin, legado de los Mayas, para la recuperación del orden mundial en los seres humanos.
Este sistema numérico, identifica y organiza todos los sentimientos, emociones y sensaciones existentes hasta este momento en el mundo, en forma positiva y negativa. Es un tipo de lectura, que lee los sentimientos individuales, hasta el más profundo. Con una matemática simple pero a la vez sofisticada, podemos identificar que siente o que está sintiendo, que le gusta o que le gustaría a una persona. Se identifican las vocaciones o las áreas de desarrollo que cada uno posee en forma natural, al nacer. Con este sistema podemos identificar los problemas emocionales que quedan en el in-consciente del niño, o adulto, proporcionado por la gestación, vale decir, lo que vivió y sintió la madre en relación con el padre y su entorno, en el embarazo.
Este sistema numérico, identifica y organiza todos los sentimientos, emociones y sensaciones existentes hasta este momento en el mundo, en forma positiva y negativa. Es un tipo de lectura, que lee los sentimientos individuales, hasta el más profundo. Con una matemática simple pero a la vez sofisticada, podemos identificar que siente o que está sintiendo, que le gusta o que le gustaría a una persona. Se identifican las vocaciones o las áreas de desarrollo que cada uno posee en forma natural, al nacer. Con este sistema podemos identificar los problemas emocionales que quedan en el in-consciente del niño, o adulto, proporcionado por la gestación, vale decir, lo que vivió y sintió la madre en relación con el padre y su entorno, en el embarazo.
En este mundo existe una diversidad de áreas, las que el ser humano naturalmente lleva en sí mismo, siendo una capacidad innata para el área determinada, es lo que llamamos vocación. Los mayas lo sabían y era identificado desde que el niño nacía, era educado en su propia vocación y luego insertado en su área natural. Esto servía para el desarrollo y la mantención natural del planeta, siendo una dinámica complementaria, solidaria y creativa. Nuestro mundo está desarrollado a un 20 % de sus capacidades, al igual que nuestro cerebro, es como si nuestro cuerpo solo funcionara desde los ojos hacia arriba y no ocupáramos el resto del cuerpo, se terminaría atrofiando y finalmente muriendo. Eso pasa hoy con las capacidades innatas del ser humano, solo estamos desarrollados en el área financiero y todo lo hacemos en pos del dinero, y falta darle importancia al otro 80%. Claramente lo vemos en los colegios, en cualquier curso, solo el 20% con suerte le va bien, el otro 80% se aburre o termina finalizando sus estudios superiores como un mal profesional, siendo esto una cadena de malas conductas, luchas de egos y poderes. Para que decir de los que no se desarrollan nada, creen que el dinero da la felicidad, roban y matan, familias se pelean y no pueden ser felices.
Mi estudio e investigación se basa en este conocimiento, tan necesario para el desarrollo humano individual, pero a la vez complementario con su naturaleza y asociación a la naturaleza en general.
Hoy los colegios y los educadores sienten cada vez más cruda la revelación a la imposición de una realidad limitada, generando violencia por parte de los educados y desconcierto en los educadores. No se sabe dónde está la falla. Se cree que al aumentar los recursos económicos a la educación, ésta mejorara. O, educación gratuita generara igualdad entre todos. Pero la palabra no es posibilidad sino capacidad.
Este sistema propone desarrollar las capacidades individuales desde que el niño nace, insertándolo en su propia área, logrando interesarlo, haciéndolo participativo e integrador. De esta forma vamos haciendo niños felices, hogares felices, ya que este sistema también integra a los padres en el desarrollo del niño, poniéndolo de la mano con el colegio y sus profesores. De esta forma como consecuencia, vamos generando la creación de nuevos oficios. Al ser vocacional, creamos ciudadanos felices, libres y creativos, por tanto un país con su propia identidad.
Este sistema propone desarrollar las capacidades individuales desde que el niño nace, insertándolo en su propia área, logrando interesarlo, haciéndolo participativo e integrador. De esta forma vamos haciendo niños felices, hogares felices, ya que este sistema también integra a los padres en el desarrollo del niño, poniéndolo de la mano con el colegio y sus profesores. De esta forma como consecuencia, vamos generando la creación de nuevos oficios. Al ser vocacional, creamos ciudadanos felices, libres y creativos, por tanto un país con su propia identidad.
DESARROLLO DEL PROYECTO - EDUCACIÓN
1. Dar a conocer este sistema.
2. Individualizar la personalidad de cada educador y comparación con los otros.
3. Al darse cuenta que todos son diferentes y que a la vez es completamente valido,
desaparece la crítica entre ellos.
4. Integramos a su rasosinio, todas las personalidades con sus correspondientes formas de proceder,
generando individualismo y empoderamiento de su propia personalidad. Este ejercicio provoca darse
cuenta quien soy viendo cuales son mis deficiencias. Antes, solo estoy preocupado de lo mal que
hacen los otros.
5. Generamos una fuerza individual y tranquilidad debido a la eliminación de la comparación.
6. Organización en sus casas, entendiendo la diversidad de formas y cuales son también en cada familia,
descansando a través del entendimiento, oséa en este punto se sabe, no se cree.
El saber da seguridad y el creer provoca vulnerabilidad e inseguridad.
7. En esta etapa se provoca seguridad personal y ya, al individualizar la personalidad se ve a los demás
como pares y no como oponentes, generando la curiosidad por saber quiénes son los demás y se elimina
el poner posturas personales ante los hechos y conductas de los otros.
8. Armonía, tranquilidad y seguridad en sí mismo, se da paso a la comprensión.
9. Seguridad en sí mismo, se desarrolla cada personalidad mostrando cualidades de cada forma,
entendiendo que todos somos parte del todo y todo es válido.
10. Integración con los otros, pero ya desde una postura segura. En esta etapa se genera la asociación y amor por el otro.
11. Entendemos los sentimientos de los demás, el porqué de las actitudes, comienza un análisis
mucho más profundo, desarrollando la prudencia.
12. Comienza la comparación positiva y la necesidad de ayudar a otros que están con problemas emocionales más profundos.
13. Consolidación de la forma de ser individual y la preparación para el despegue individual.
Esperando una buena acogida, saluda atentamente,
Verónica Sepúlveda Tarud